Cambio de ciclo en la economía española. La recesión deja paso al estancamiento. O dicho de otro modo, el Producto Interior Bruto (PIB) esquivará la contracción en tres o seis meses a más tardar en términos trimestrales (según las diferentes previsiones), pero el camino lejos de estar despejado está sembrado de minas. Los institutos de coyuntura dan por hecho que hasta el año 2012 la economía española no recuperará tasas de crecimiento superiores al 2%. Nada nuevo. Lo peor es que tanto 2010 como 2011 se presentan como años perdidos, aunque con una novedad.
Al contrario de lo que sucedió durante el bienio recesivo de 1993-94, la economía no saldrá con fuerza del largo periodo de contracción económica, sino de una forma suave. Tan suave que habrá que esperar hasta el último trimestre de 2010 para encontrar un crecimiento positivo del PIB en términos anuales.
Al menos, eso es lo que opinan los 15 servicios de estudios que participan en el Panel de Funcas, que estiman un aumento del PIB del 0,5% para dentro de un año. ¿Qué significa esto? Pues que si tras la anterior recesión la economía española creció un 0,2% y un 2,2%, respectivamente, inmediatamente después de cuatro trimestres de decrecimiento del PIB, en esta ocasión la economía acumulará ocho trimestres consecutivos de contracción; pero durante al menos durante cuatro trimestres más no estará en condiciones de recuperar una tasa de crecimiento cercana al 2%. Es decir, que el PIB crecerá por debajo de su potencial durante algo más de un trienio.